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Gaceta de La Solana
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Educación
E
l 24 de septiembre de 1917 quedaba
inaugurado el primer curso del cole-
gio San Luis Gonzaga en el edificio
que hoy conocemos como Centro Cultual
‘Don Diego’. Así lo reflejaba en los años
70 el entonces Cronista Oficial de la Villa,
Antonio Romero Velasco, quien narraba
las vicisitudes vividas en las primeras
seis décadas de vida del centro educati-
vo, pasando por la fundación, el traslado a
la calle Comendador en 1941, y posterior-
mente, a su actual ubicación de la Plaza
de Santa Ana en 1977.
Muchas han sido las vicisitudes desde
que llegaron las primeras cuatro Hijas de
la Caridad, que fueron la sor María Cris-
tina (superiora), sor Vicenta, sor Eulalia y
sor Josefina Martialay Delgado. Esta úl-
tima continuó hasta su fallecimiento en
1986 y su arraigo fue tal que en 1964
se le concedía el nombramiento de Hija
Adoptiva de La Solana. En 2011, las her-
manas tuvieron que dejar la casa, aunque
continuó funcionando el colegio con las
mismas normas de la comunidad funda-
dora, siendo en la actualidad su director
Miguel Díaz-Cano.
Dicho esto, hemos querido bucear en los
archivos para ofrecer algunas pinceladas
sobre la sociedad solanera de hace un si-
glo ¿Cómo era La Solana en aquel 1917?
Europa se batía en la Primera Guerra
Mundial o Gran Guerra y estaba a punto
de iniciarse la Revolución de Octubre en
Rusia, con la honda incidencia que tuvo
en la vida de muchos países.
Pero en el plano local, nos disponíamos
a celebrar unas elecciones municipales
para renovar la mitad de los concejales
por distritos, dos por el de la Plaza, por
El Santo otros dos y tres
más
por el del
Convento, aunque una circular del Go-
bernador aumentaba un concejal más en
el distrito de la Plaza debido al aumento
de habitantes, que habían subido a 8.710.
MAL ESTADO DE ALGUNAS CALLES
Precisamente en el pleno del Ayun-
tamiento del 28 de octubre se recogían
las quejas de varios vecinos de las calles
Montante, Comendador y Cruz de Hierro,
que exponían el mal estado de las mismas:
“siendo así que son las más concurridas,
debido que todo lo que se exporta e impor-
1917: El año que inició su andadura
el San Luis Gonzaga
Paulino Sánchez Delgado (Cronista Oficial de la Villa)
ta a Manzanares y Valdepeñas tiene que
pasar por dichas calles haciéndose impo-
sible el tránsito de carruajes en épocas de
lluvias, que así mismo los bodegueros del
barrio del Camino de Valdepeñas.”
NUEVAS CALLES
El alcalde, Antonio Gallego Peláez, expo-
nía en el pleno del 4 de marzo la apertura
de nuevas calles por el crecimiento de la
población por la parte de saliente a raíz de
la apertura de una calle central, para la que
proponía el nombre del político Emilio Nie-
to. Para otras se proponían los nombres de
Cardenal Monescillo, Sagasta, Cánovas del
Castillo, Emilio Castelar, General Espartero,
Campoamor, Sagunto, Numancia, Lepanto,
Cádiz, Trafalgar, y Zaragoza, a las que se
unió el 27 de mayo la dedicada al General
Aguilera.
‘LA VICTORIA’, FÁBRICA DE HARINAS Y
ESCASEZ DE TRIGO
El industrial Gabriel Romero de Ávila in-
formaba el 11 de noviembre al Ayunta-
miento:
“que había montado una nueva
fábrica de harinas sistema automático
por cilindros, única en esta población”.
Se trataba de ‘La Victoria’, posteriormente
conocida como la de
“La Lola”.
Poco después, el 16 de diciembre, los pa-
naderos se quejaban ante el Ayuntamiento
de la falta de trigo en la localidad, por lo que
el Ayuntamiento acordó prohibir la salida del
mismo para poder abastecer a la población.
COOPERATIVA NUESTRA SEÑORA DE PE-
ÑARROYA
Ese mismo año comenzó a funcionar la se-
gunda cooperativa de vinos de La Solana, la
denominada Nuestra Señora de Peñarroya,
construyéndose en terrenos ubicados en el
Camino de Santa Inés, en la zona norte del
casco urbano. Gracias a un ejemplar de los
estatutos podemos conocer algunos datos so-
bre el comienzo de la sociedad. Por ejemplo,
el capital social era de SETENTA Y CINCO MIL
PESETAS, en cuotas de CINCUENTA PESETAS
cada una, siendo imprescindible para ser
socios poseer viñas en el término municipal,
pudiendo pertenecer a la entidad no sólo los
hombres, sino las mujeres viudas o solteras
mayores de edad. En total, los socios fundado-
res fueron 127, de ellos 9 mujeres y el primer
presidente Manuel Antequera González.
MÚSICA Y TOROS
Para finalizar dos pinceladas sobre la cultura
y el ocio. Por un lado señalar que, según refleja
el acta del Ayuntamiento del 1 de julio, los aspi-
rantes que solicitaban ingresar en la Banda de
Música se obligaban a pertenecer y cumplir su
Reglamento
“por lo menos CUATRO AÑOS”.
Y según una información aparecida en el
periódico “El Pueblo Manchego” del 23 de
julio, la feria de aquel año contó con una no-
villada con ganado de
“…
don Sabino Flo-
res y los encargados de pasaportarlos Ma-
driles y el montañés Esteban Salazar…..”
Finalmente, desear feliz CENTENARIO al
veterano centro educativo.
Fachada del colegio antiguo en la calle Comendador