GACETA DE LA SOLANA 309

Gaceta de La Solana 48 Agricultura A orillas del Sil, suceden cosas extraordinarias… ‘Terras da Lasta’ es la nueva ‘joya’ de Bodegas Romero de Ávila E n el enclave privilegiado de Valdeorras, en las laderas que dan vida a la uva godello , Antonio Romero de Ávi- la, un joven bodeguero de La Solana, ha materializado una visión que trasciende generaciones. Su pasión por la eno- logía y el compromiso con la empresa familiar lo han llevado a crear un vino que marca un antes y un después en la historia de Bodegas Romero de Ávila: Terras da Lastra , un blanco que ya conquista paladares exigentes. Todo comenzó hace tres años. Antonio hizo un viaje for- mativo a Valdeorras y allí tuvo su primer encuentro con esta variedad, autóctona del sur de Galicia. Inspirado por la ven- dimia manual en las laderas de la región y alentado por su mentor, el profesor Manuel, Antonio quedó cautivado. “Me enamoré de esta variedad”, confiesa. Trabajó junto a su padre, Santiago y su esfuerzo conjunto ha dado lugar a esta nueva ‘joya’, que enriquece la historia de esta bodega solanera. Elegancia, Equilibrio y Personalidad La uva godello se cría sobre lías y aporta una textura sedosa y un cuerpo elegante al vino, que lo convierten en una gran experiencia gastronómica. “No es un vino fresco al uso; es mucho más. Su acidez equilibrada en crianza y su carácter lo hacen perfecto para maridar con pescados grasos, que- sos maduros e incluso carnes”, explica. A diferencia de otras variedades blancas gallegas como el albariño, más punzante y ácido, Terras da Lastra despliega frescura y estructura en perfecta armonía. Una buena opción para el chateo y para acompañar platos elaborados. Historia y proyección El nombre Terras da Lastra rinde homenaje al entorno natural donde se asienta esta uva: el parque natural Serra da Enciña da Lastra , limítrofe con El Bierzo leonés. Anto- nio optó por mantener la elaboración allí: “Es la zona de confort de la Godello ; no tiene sentido plantar esta varie- dad en La Mancha”. Desde su reciente llegada al mercado, el nuevo blanco ya ha cosechado elogios de expertos y afi- cionados. “Nos ha sorprendido la acogida, especialmente en La Solana”, comenta Antonio. En su corta trayectoria, Terras da Lastra también ha cruzado nuestras fronteras, llegando a reconocidos mercados como China, Vietnam y la República Checa, donde ha sido muy bien recibido en cartas de prestigio. El Legado se reinventa Según Antonio Romero de Ávila, Terras da Lastra es solo el comienzo “porque la innovación sigue siendo una cons- tante para nosotros”. “Pero ahí está mi padre para recordar- nos la importancia de mantener los pies en el suelo”, aclara entre risas. Con este blanco, Bodegas Romero de Ávila amplía su gama de vinos y reafirma su compromiso con la excelen- cia, la innovación y el respeto por el terroir. “Cada botella cuenta una historia de tradición y modernidad, un equili- brio que promete cautivar a quienes buscan vinos excelen- tes”, concluye. Antonio Romero de Ávila en el valle de Valdeorras con el nuevo blanco de su bodega.