GACETA DE LA SOLANA NÚMERO 305
Gaceta de La Solana 52 Nuestra Historia C oncepción M oya G arcía y C arlos F ernández -P acheco S ánchez -G il E l arte mudéjar en la provincia de Ciudad Real, se desarrolló en una etapa tardía, y en él se pueden observar dos períodos. El primero, a finales del siglo XIII y en el XIV se de- sarrolló en iglesias de pequeño tamaño, de una sola nave, sencillas y austeras, en las que predominan las cubiertas de par y nudillo, bien a dos aguas con tirantes sencillos, como la de los Pozuelos de Calatrava, o de par y nudillo con lima bordón y tirantes apareados, como la de Retuerta de Bullaque. Una iglesia de mayor tamaño y complejidad es la de Santiago de Ciudad Real, con cubiertas de par y nudillo de tradición almohade, un almizate central con lazos en forma de estrellas y decoración vegetal, junto a polígonos de ocho puntas, construida en la segunda mitad del siglo XIV 1 . El segundo momento lo encontra- mos a finales del siglo XV y comienzos del XVI, en el que se combinan ele- mentos tardogóticos con mudéjares. Destacan la iglesia de Tirteafuera, con tres cubiertas distintas: una capilla de planta ochavada con limas moamares, el crucero de planta poligonal con el mismo tipo de limas, y la nave de par y nudillo con tirantes pareados y canes 2 , la de San Sebastián en Porzuna, con una armadura sencilla de parhilera, la del monasterio de Nuestra Señora del Rosario de Almagro, con armadura de par y nudillo decorada con lacerías de formas estrelladas y cuadrangulares 3 , la de Nuestra Señora de la Asunción de Almodóvar del Campo y las de San Juan Bautista y Santo Domingo de Chillón. De este período hay dos cubiertas en La Solana, una en la capilla de la epístola de la ermita San Sebastián y otra en un edificio civil, la audiencia, realizadas ambas por Juan de Orihuela. La ermita de San Sebastián tiene la peculiaridad de contar con elementos mudéjares de los dos momentos. El templo posee una tipología cisterciense, con una sola y sencilla nave cubierta a dos aguas, dotada con un artesonado de madera de pino labrada, a par y nudi- llo. En este tipo de armadura los pares están dispuestos según la pendiente del tejado, situándose a dos tercios de altu- ra el elemento conocido como nudillo, que sirve para unir los pares. Sobre los nudillos encontramos el almizate, una tablazón plana y horizontal. Los pares se sustentan en los estribos, que trans- miten los empujes hacia los muros, mientras que los tirantes se utilizaban para anular los empujes horizontales, aumentando así su estabilidad. El nú- mero de tirantes de la ermita eran 9 do- bles sobre zapatas y 4 sencillos sobre la cabecera, de los que solamente se con- serva uno al perderse el resto durante la guerra civil y otros dos que estarían sobre la desaparecida tribuna. Cada ti- rante mide 18 pies. En cuanto al segundo momento, re- lacionado con el maestro Juan de Ori- huela, indicar que la primera referencia El arte múdejar en La Solana Cubierta mudejar en la capilla de la epístola de la ermita de San Sebastián 1. Sainz Magaña, E.: “El arte medieval” en Ciudad Real y su provincia. Tomo III. Arte. Editorial Gever. Sevilla, 1996, p. 59 y 60. 2. Esparragura, G.; Berdaguer, M. A.; Zaragoza, T.; Zarza, A. C.: “La arquitectura religiosa en la provincia de Ciudad Real a lo largo de su historia” en Actas del I Congreso de Historia de Castilla-La Mancha. Tomo VII. Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. Talavera, 1988, p. 325. 3. Herrera Maldonado, E. y Sainz Magaña, E.: “El mudéjar del siglo XVI” en Ciudad Real y su provincia. Tomo III. Arte. Editorial Gever. Sevilla, 1996, pp. 97 y 98. Fragmento de libro de ejecutorias, donde aparece Juan de Orihuela como maestro de obras de la capilla.
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