GACETA DE LA SOLANA 300 MAYO-JUNIO 2023

Gaceta de La Solana 74 Reportaje Trabajar con Carlos Vermut, un sueño Gloria tiene claro quién debería dirigir, algún día, ese anhelado argumento. “Me encantaría trabajar con Carlos Ver- mut. Me gusta la idea que tiene del cine y mi forma de escribir películas es simi- lar. Mi sueño sería que la dirigiera Car- los”. Una conexión ‘galana’ cuyo resul- tado podría ser sinónimo de éxito, salas llenas y un ‘pelotazo’ comercial para la industria. Llegado el caso, y puestos a pedir, ¿Quiénes serían los intérpretes? “Quisiera dar una oportunidad a nuevas caras, pero reconozco que es una mala apuesta porque una guionista novel y actores desconocidos no venden. Sería un reto”. Otro envite es el cine inter- nacional, y por qué no, en la meca del cine. “Estaría bien hacer una peli en el extranjero, ¡pero Hollywood está muy lejos todavía!”, exclama entre risas. Hablando de la parte pecuniaria, cuenta que en el cine hay más ‘cash’ que en las series. La forma de trabajar es si- milar. Las escenas se miden en páginas de guión, y cada página puede equivaler a un minuto de filmación. “En cine rue- das cuatro páginas al día, y en series pue- des llegar hasta diez. En las pelis, todo es más lento, más cuidado y muy milime- trado para que salga a la primera. Todo el trabajo extra supone más dinero, así que cada minuto cuenta… y cuesta”. Gloria es natural y espontánea por naturaleza. Todoterreno, osada, se atreve con cualquier cosa que no esté en el guión. “Mi compañera dice que somos de barro porque hacemos de todo”. Quiso ser especialista y rodar es- cenas de acción con coches, porque le encanta el volante. En Los hombres de Paco dobló a la protagonista. “No sabía conducir, así que me pusieron su ropa, me peinaron como ella y grabé una se- cuencia”. También en El pueblo . “Había que conducir por las calles estrechas del pueblo, llegar a la plaza deprisa, frenar en el momento adecuado, con todos delante y yo sola en la furgoneta. Llevaba un walkie y la directora no pa- raba de decir que lo hiciera un hombre, pero clavé la escena”. ‘Bautizada’ sin padrino La gente de este mundillo suele en- trar por recomendaciones familiares, lo que da más valor a la carrera de Gloria. “Estoy orgullosa de haber llegado don- de estoy sin ayuda de nadie. Mi padre es frutero y mi madre costurera”. Su actual soltería le facilita esta vida llena de sa- crificios. “Al principio te imaginas que esto es algo glamuroso, maravilloso..., pero hay muchos entresijos y a veces lo que pasa detrás de las cámaras es más entretenido que lo que se está graban- do”. “Es otra película”. Dice que es muy difícil llevar una relación seria o estable. “La mayoría del gremio está divorciado o separado”. “Pasas 14 horas al día, 5 días a la semana con las mismas perso- nas y al final puedes llegar a algo, pero cuando termina el proyecto, cada uno puede ir a un lugar diferente y vuelves a empezar. No hay horario fijo, ni vaca- ciones…es muy complicado”. En cual- quier caso, ama su profesión y quiere seguir por esos derroteros. “No aspiro a tener el mejor coche o una mansión, sino a ganar lo suficiente para hacer lo que más me gusta, que es viajar”. Además de conocer mundo, con muchos trayectos internacionales en su pasaporte, sigue formándose. “No pue- do parar de hacer cosas, soy un poco friky y me gusta saber de todo”. Cursos de guión, marketing, fotografía o inteli- gencia artificial ocupan su poco tiempo libre. Esta última materia será causará una espectacular transformación en el celuloide. “Las nuevas tecnologías van a cambiar el cine”. “No harán falta ni intérpretes”. “Ya han recreado actores fallecidos”. De momento, su profesión no le garantiza empleo estable, pero ya tiene un estatus que le permite elegir. Productoras como Globomedia o Bow- finger conocen su modus operandi. Alma de guionista Desde que aterrizó en este mundo lo ve de otra manera. Ahora se fija en detalles que antes pasaban desapercibi- dos. “Quería ser directora, pero me di cuenta que quería escribir mis propias películas”. Le gusta el thriller psicoló- gico y el drama, así que su ópera prima como guionista irá por esos derrote- ros. Tiene algunos bocetos que le han animado a presentarse en el concurso de Residencias Academia de Cine. “Si escogen mi proyecto, iré a clases con otros profesionales que me ayudarán a sacarlo adelante”. En agosto lo sabre- mos. Por ahora, el nombre de Gloria aparece en los créditos como ayudante de dirección. No le seduce ‘ascender’ a jefe de producción, ni a directora. “Cuando ves tu nombre en la pan- talla te hace ilusión, pero lo que más me emociona es que mis padres estén orgullosos de mí. No soy una estrella, a veces solo pongo agua a los actores, pero me gusta lo que hago”. Seguro que le aguarda un próspero porvenir, y quién sabe si algún ‘Goya’ al mejor guión original. Soñar es gratis. Así que preparemos la alfombra roja, por si acaso. Esto no es un ‘The end’, sino más bien un ‘To be continued’. Atentos al próximo episodio. La solanera es extrovertida dentro y fuera del trabajo. Aquí está con la actriz Silvia Abril -dcha-.