GACETA DE LA SOLANA 299 MARZO-ABRIL 2023

Gaceta de La Solana 11 Semana Santa P aulino S ánchez D elgado (C ronista O ficial de la V illa ) S i hiciéramos un recorrido por las celebraciones de Semana Santa en las diferentes poblaciones de Espa- ña, seguro que encontraríamos peculia- ridades que diferencian esa celebración litúrgica en cada una de ellas. Si bien en la de La Solana hay varias, en esta ocasión vamos a comentar una bastante exclusiva de aquí y que sobrevive a lo largo de los siglos. La actual Hermandad del Santo Se- pulcro y Soledad de la Virgen, entonces llamada del Entierro de Cristo, tiene sus orígenes en el año 1632, primero en la ermita del Calvario y luego en la de Santa Quiteria. Al igual que el resto de cofra- días y hermandades de La Solana ha su- frido diferentes cambios a lo largo de sus casi cuatro siglos de vida. Han desapa- recido imágenes, andas, documentos…, pero la hermandad sigue recorriendo las calles solaneras cada Viernes Santo, recordando el primer entierro de Cristo celebrado en Jerusalén. Hay una tradición que se mantiene perenne en esta cofradía y de la que nos hablan sus ordenanzas tras la re- fundación del año 1831. Hablamos del arrastre del sol y la luna, que desfilan justo delante del paso del Santo Sepul- cro. Al respecto, el artículo séptimo de las citadas ordenanzas señalaban esto: “Dos de los aspirantes llevarán arras- trándose por el suelo, en esta procesión dos crespones negros, que representan el Sol y la Luna”. El siguiente capítulo, el octavo, añade que otros “dos les pre- cederán con tambores enlutados y des- templados que tocarán pausadamente”. Los primitivos sol y luna desapare- cieron durante la guerra civil, tantas veces aludida, igual que ocurrió con los tambores. Posteriormente, se recuperó la tradición. Primero, ambos símbolos celestiales fueron construidos de ma- dera más sencilla, hasta que acabaron siendo sustituidos por otros metálicos y con iluminación incorporada, que ya estaban preparados para la procesión de 2007. Al no poder realizarse el desfile de aquel año como consecuencia de la llu- via, el estreno tuvo que aplazarse hasta el año siguiente. Pero lo importante es que la tradición se mantiene, y además siempre son arrastrados por niños ves- tidos de nazarenos, que marchan de- lante del Sepulcro en la noche de cada ¿Fiesta de Interés Turístico Regional? En el anterior número de GACETA nos referíamos a las diferencias existentes en el carnaval solanero con respecto a otros carnavales, por ejemplo con la cantera de murgas y el entierro de La Colasa, que lo diferencian de otros, para justificar la petición oficial para que sea declarado Fiesta de Interés Turístico Regional. Cabe preguntarse si esta tradición del sol y la luna, unida a otras particularidades que diferencian a nuestra Semana Santa de otras, junto a su solemnidad y gran participación, po- drían hacerle merecedora de este mis- mo reconocimiento. Todo es andarlo. El sol y la luna, esencia de nuestra Semana Santa Viernes Santo desde la ermita de Santa Quiteria. Es, indudablemente, una cos- tumbre bastante exclusiva de la Semana Santa solanera. El significado de ese arrastre es re- cordar lo ocurrido en el primer Viernes Santo, cuando el cielo se oscureció en el momento de la muerte de Jesús en la Cruz, según narran los Evangelios. Luna y sol desfilando en la útlima procesión del Santo Entierro.

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