GACETA DE LA SOLANA NÚMERO 295

Gaceta de La Solana 25 Reportaje del paracaídas, donde te quiera llevar”. En cierta ocasión, en un salto nocturno, le faltó poco para ‘colarse’ en un esta- blecimiento comercial. “Veía las letras de Mercadona y Burguer King y cada vez me acercaba más, el aire me lleva- ba directo hasta allí y casi me meto en la hamburguesería”. Antonio prefiere la luz del día. Una vez chocó en el aire con otro compañero, un lance angustioso que cuenta con naturalidad. “Había peligro de quedar enredado en las cuerdas, que se cerrara el paracaídas, pero al final no pasó nada”. Otro momento anecdótico ocurrió en Chinchilla y evocaba algún momento de la divertida película Reclu- ta con niño . “Caímos en una zona don- de había un hombre arando. Extrañado, salió de su tractor exclamando ¡Pero esto qué es! El salto se produce desde unos 400 metros, unos 1.200 pies, distancia su- ficiente para que se abra el paraca de emergencia, si fuera el caso. Todo está diseñado para una respuesta rápida ante el enemigo. La preparación es exi- gente y minuciosa. Hay muchas com- probaciones previas, mucha seguridad y hay que estar muy bien entrenado físicamente. “No tenemos las rodillas mal por saltar, sino por correr”, confie- sa. El paracaídas sujeta un peso limi- tado, incluyendo el material (mochila, casco, chaleco, fusil…) Todo está muy calculado y cualquier ‘sobrante’ podría ser peligroso. Entrenamiento espartano Al son de diana, los paracaidistas se adiestran de forma espartana. “Es una de las unidades más duras del Ejérci- to de Tierra, a nivel físico y psíquico”. Como ingenieros zapadores, se instru- yen para favorecer el movimiento de las tropas en el combate y entorpecer las del adversario. “Nuestra misión es buscar artefactos, explosivos o trampas para neutralizarlas y construir obstácu- los para frenar el avance enemigo”. Coincidiendo con la pandemia, An- tonio participó en tareas de desinfección de polideportivos. Y tras completar un curso de formación, fue rastreador. Cu- riosamente, le tocó la provincia de Ciu- dad Real y llamó a muchas personas de La Solana. “La mayoría estaban en sus casas, pero algunos intentaban engañar. Alguno me dijo que había ido a dar de comer a las ovejas…”. También sirvió a la patria tras la borrasca Filomena, qui- tando nieve y ayudando a sacar coches de los parking en Madrid. Del paracaídas al tambor Descendiente de músicos, terminó entrando en la banda de la Brigada Pa- racaidista. Qué menos. “La verdad es que me hacía ilusión seguir los pasos de mi padre y de mi abuelo”. Desde prin- cipios de año toca el tambor con dedi- cación exclusiva, rebajado de servicios. Los ensayos son diarios porque no les faltan actuaciones por la geografía na- cional. Procesiones, desfiles, juras de bandera y otros actos castrenses. Mu- chas horas sin parar, marcando el paso, cabeza arriba, sin hablar, sin poder salir de la fila… psicológicamente es duro”, asegura. En Alcalá vivió un momento que tilda de sublime. “Felipe VI pasó revista muy cerca de mí. Impresiona, es el jefe y me entró una cosilla por el cuerpo”. En sus pocos ratos libres, tam- bién toca el saxo y la guitarra. Sin miedo a morir, lleva grabado a fuego servir a su país, como cualquier soldado profesional “Ante todo, soy mi- litar”, dice con orgullo. “Al jurar bande- ra decimos ‘con un beso te juré y con mi vida te defenderé’, así que estaré donde me llamen”. Ucrania, por ejemplo, po- dría convertirse en un escenario real, algo que no rehúye. “Nos preparamos cada día para esa posibilidad. Sus pa- dres asumen el riesgo y reconocen tener el corazón en un puño. “La noche ante- rior al salto no duermen”. Sus hombreras, vacías de rango toda- vía, esperan vestirse con nuevos grados militares en la escala de mando. Amén de misiones y maniobras, el siguiente objetivo será promocionar para sar- gento el próximo año. Sólo nos queda cantarle la primera estrofa del himno de la BRIPAC En marcha, paracaidista, que tienes hambre de gloria. Tu temple, arro- jo y vista preludian fe en la victoria… Uno de los saltos del solanero Antonio Serrano Arcos desde un helicóptero Chinook de las FAMET.

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