GACETA DE LA SOLANA Nº288

Gaceta de La Solana 78 La Gaceta Deportiva A urelio M aroto E l Frutas Doña Ramoncita-CB La Solana encontró su techo en el último escalón de su rascacielos particular. Solo el CB Socuéllamos fre- nó el indomable ímpetu de los amarillos en su sueño –ahora sí- de ascender a Liga EBA. La cartera pudo a la cantera, es así. Pero los techos están para rom- perlos y el llanto al terminar la final del pasado 6 de junio debe ser el punto de partida para seguir creciendo. No lloréis. La épica no os la quitará nadie. Ni la sensación de competir por tu pueblo, por el escudo que más sien- tes, con tu gente, con aquellos que han crecido contigo en la pista. La Solana está orgullosa de vosotros. De aquellos 16 meses y medio sin perder; de esas 11 victorias consecutivas; de esa final de Copa frente al Daimiel, que nos enamo- ró a todos; de esos 118 puntos el día del Tomelloso; de ese partido perfecto en Socuéllamos en liga regular… Pero, so- bre todo, detrás de los números emerge un modelo de actuación, una filosofía de trabajo, un cuaderno de Bitácora perfectamente definido, una familia bien avenida que ya es ejemplo en toda la región. No lloréis. El deporte es pendu- lar y los disgustos acaban en fiesta si uno persevera. La botella está medio llena, por no decir casi llena. Faltó la última gota, la del ascenso, pero pocos cimientos están mejor puestos para in- tentar rematar la faena. Sabemos que no es fácil empezar otra vez de cero, entrenar duro cada día, remar en cada partido y mantener la motivación. Sin embargo, el premio que espera merece la pena. No lloréis. El corazón de los solaneros es vuestro. El centenar que fue a veros a ese play-off regresó tan contrariado como orgulloso. Tenéis que preguntaros cuánto vale la labor de cantera que habéis cuaja- do. ¿Cómo se mide eso? Sois la envidia de muchos y tenéis la paciencia de pocos. Por eso esta generación dorada ha llegado hasta aquí. Pensad que el camino no ha terminado. Que no hay dos sin tres. No lloréis El Frutas Doña Ramoncita-CB La Solana se quedó a las puertas del ascenso, pero volvió a conquistar el corazón de los solaneros Los subcampeones son nuestros campeones. Los jugadores no pudieron reprimir las lágrimas tras perder la final.

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