La_Solana_282

Gaceta de La Solana 24 Cultura E s una pluma inquieta, una más de las muchas que pululan por La Solana. Afortunadamente. Anto- nio García-Catalán no para de escribir, sobre todo teatro. También cuentos y relatos, como el último, titulado ‘Supe- ra el desafío navideño’, que ha logrado un accésit en el Certamen Internacio- nal ‘Aste Nagusia’ (Semana Grande) de Bilbao. El trabajo, de unos seis folios, cuenta la historia de dos abuelos que ro- ban ovejas de belenes para destrozarlas con una almádena y subir la ‘hazaña’ a Internet. Eso sí, por una buena causa, ya que cada oveja triturada recibiría una ayuda para sanar a una niña enferma. Una historia algo sui géneris, pero ideal para incluirla en el libro que publicará la organización de este concurso, y cuyo título no puede ser más expresivo: ‘¿A que no hay huevos?’. Felicidades. Dos abuelitos muy solidarios Antonio García-Catalán, autor del relato Flamenco para todos R icardo Fernández del Moral es como aquella famosa marca de cerveza: donde va, triunfa. El artista de Daimiel volvió a pisar La Solana el pasado 27 de julio, con- quistando al personal sobre el albero de la plaza de toros. Era su tercera actuación tras el obligado confina- miento y no defraudó. El centenar de espectadores congregados disfrutó con la voz poderosa y las manos ági- les del manchego. “En estos concier- tos hago un flamenco para todos”, decía a GACETA momentos antes de salir a escena. Tres días antes, el 24, Jairo de Rema- che también actuó en la plaza de toros dentro del programa alternativo de la “no feria”. El joven artista albaceteño presentó en primicia su primer disco, a punto de salir al mercado. También añadió versiones de temas muy conoci- dos. Este fue su primer concierto tras el parón de marzo. Y anteriormente tam- bién había actuado la orquesta Orfeo, ya conocida en La Solana. Ricardo Fernández en su recital del 27 de julio

RkJQdWJsaXNoZXIy NTEwODM=