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Gaceta de La Solana 48 Vida Municipal El equipo de gobierno seguirá siendo monocolor. Cuando la oposición sí cogobernó No hubiera sido la primera vez que los par- tidos de la oposición tienen responsabilida- des de gobierno en la actual democracia en La Solana. En las tres primeras legislaturas sí aceptaron delegaciones y otros cargos. En la primera (1979-1983), el PSOE de José López Posadas dio concejalías a Unión de Centro Democrático (UCD), Coalición De- mocrática (CDI) y Partido Comunista (PCE). En la segunda (1983-1987), ya con mayoría absoluta, López Posadas y después Julián Simón también cedieron delegaciones a Alianza Popular (AP-PDP-UL) e Independien- tes La Solana (ILS). Y en el mandato 1987- 1991, Nemesio de Lara, también con mayo- ría absoluta, derivó delegaciones a Alianza Popular e Izquierda Unida. Fue la última vez que el partido gobernante ofreció, con éxito, cedió cuota de poder a la oposición, hasta este nuevo intento de 2019, sin éxito. Resumen de un pacto de gobierno frustrado El alcalde ofrece un gran acuerdo para la cobogernanza, que la oposición rechaza en pleno. Seguirá habiendo un equipo de gobierno monocolor E l alcalde de La Solana, Luis Díaz-Cacho, compareció ante los medios de comunicación el pasado 19 de junio para anunciar una propues- ta y su resultado, ambas al mismo tiem- po. Reveló que se había reunido con los tres grupos políticos de la oposición en la Corporación (Ciudadanos, Partido Po- pular e Izquierda Unida) para proponer- les un gran pacto de cogobernanza mu- nicipal en el Ayuntamiento. Les ofrecía delegaciones de concejalías, presidencias de comisiones, incluso tenencias de alcal- día con presencia en la Junta de Gobier- no Local, a fin de compartir las tareas de gobierno en adelante. Pero en esa misma rueda de prensa traía la respuesta negati- va de los tres partidos, que rechazaron el ofrecimiento por distintas razones. El regidor cree que, tras la crisis sanita- ria, hace falta “un pacto para recomponer el presente y planificar el futuro gober- nando juntos”, dadas las circunstancias especiales que atravesamos. Llegó a decir que “los programas electorales no valen para nada a día de hoy porque hay otras urgencias y los recursos son muy limita- dos”. Por eso, pidió a los concejales su co- laboración directa en la gobernanza del Ayuntamiento “por el interés general”. Lamentó la negativa, aunque prefirió ser comprensivo. “Respetamos la decisión y mi mano seguirá tendida”, insistió. Tanto Ciudadanos como IU explica- ron el porqué de su ‘no’ en sendas rue- das de prensa. La formación naranja cree que, antes de un pacto, es necesa- rio “consenso, unanimidad y audito- rías”, según declaró su portavoz, Luisa Márquez. Mientras, Izquierda Unida considera que “no hace falta estar en el gobierno para defender a los solaneros, como ya hemos demostrado”, declaró la concejala María Pérez.